Málaga, 2 de Junio de 2024
Me acosté y al despertar eran las 9.00AM uffff que tarde, pensé. Me asomé por la ventana y vi el cielo totalmente ennegrecido con una temperatura anormal para ser principios del mes de Junio. Ni me lo pensé. Era el día adecuado despues de mucho tiempo para realizar una ruta mítica para mi. Estaba decidido El Boticario-El Cochino y vuelta era el destino.
Hacía bastante que no aparcaba en el Boticario. El cielo estaba muy oscuro. 17 grados y comienzo el ascenso a ritmo continuo en los primeros 3 kms siempre duros. Que maravilla !!! que recuerdos tenía en la mente.
El carril está arreglado y es una gozada rodar con una paz que no se encuentra en ningún sitio. Terminada la subida hasta el 3 comienza un terreno mas accesible, disfrutando del paisaje, hasta el km 7 donde comienza lo más dificil de la ruta.
Aqui el desnivel sube por momentos y hay que poner la reductora para ir subiendo a ritmo hasta, como siempre reventar a altura del km 8 donde es muy complicado ya subir.
Andar rápido es el siguiente objetivo hasta llegar al km. 9 y dirigirme con unos montes totalmente entoldados de nubes hacia el Hotel Humaina. Preciosa imagen y nada normal ya en pleno verano.
Llego al Hotel Humaina en el km. 10 y accedo a la derecha para subir los 2 kilometros que faltan, en fuerte subida hasta el Cochino. Parece una mañana de invierno, buena temperatura pero unos nubarrones y oscuridad dignos del invierno. Como es lógico ayuda muchísimo para ir subiendo lentamente.
Llego a la altura del Mirador de El Cochino, y disfruto como antaño, envuelto en nubes. Paz y mi vista de pájaro a una Málaga casi invisible. Son momentos de vida, de mucha vida. Sentir es el objetivo. Es el momento de la vuelta......
Comienzo la bajada a buen ritmo, disfrutando al máximo del entorno y dinamitando los kms. en dirección contraria y ya notando el esfuerzo del rutón.
Llegado al km 17 noto cansancio, y voy a ritmo pero veo que el final va a ser dificil. Todo mas o menos bien, hasta el km. 20 donde comienzan las dificultades, el km del 21 al 22 en subida pertinaz sin descanso y el cuerpo estalla. Las fuerzas me flaquean pero voy subiendo como voy pudiendo. No hay más.
Llego por fin al cruce del km. 22, es ida es el km 3 y ya en bajada voy sufriendo, el sol hace acto de presencia ya han sido bastante dificiles, aunque hayan sido en bajada. Voy muy justo de piernas.
A base de corazón poco a poco voy pasando estos kilometros para llegar al Boticario y terminar un entreno que hacia tiempo tenía ganas de volver a repetir y un 2 de Junio de 2024 lo he vuelto a realizar. Sin lugar a dudas es el mejor escenario para hacerse fuerte y razones tengo para decirlo de nuevo.
El Boticario siempre en mi corazón. Aqui me hice Atleta, maratoniano y he escrito grandes entrenos y un lugar donde hay que volver siempre que se precie.
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