martes, 31 de mayo de 2016

ENTRENO ESPECIAL DIRIGIDO BEER RUNNERS MALAGA JUNTO A LOLA MARIN

  
Málaga, 31 de Mayo de 2016




EL HURACÁN 
“LOLA” 
ARRASÓ EN LA MALAGUETA






Se la esperaba como agua de mayo y se hizo rogar, aunque finalmente apareció, con algo de retraso, para acabar arrasando a su paso. Así fue el día de Lola Marín, la protagonista del entrenamiento dirigido de ayer de los Beer Runners Málaga.




Hablar de Lola Marín es hacerlo de una excelente atleta, con una capacidad enorme de sacrificio, pero sus cualidades aumentan en las distancias cortas, en el trato cara a cara, pues hablamos de una mejor compañera, amiga y, en definitiva, de una maravillosa persona. Tener a Lola en Beer Runners Málaga es un auténtico privilegio y, por ello, Manuel del Río, nuestro capitán, quiso rendir tributo a su trayectoria este año, en el cual ha participado, por ejemplo, en maratones como la de Sevilla y Roma, además de firmar fantásticos resultados en otras numerosas carreras. Por delante aún quedan más retos, como la Media Maratón de Lisboa o la Gran Vuelta al Valle del Genal, ambos en el mes de octubre.




Su última gran hazaña no fue tanto deportiva como sí personal. La pasada semana, Lola Marín participó en la carrera “La Bella” de la Animal Trail de El Burgo, junto a otros compañeros del grupo. Un percance en forma de lesión privó a uno de nuestros componentes, John Pearson, de finalizar la prueba, aunque no le faltó la compañía y el apoyo de nuestra protagonista, que no se despegó del accidentado hasta que llegaron las asistencias, para, mucho después, cruzar la línea de meta con todos los honores.
Gestos que merecen todo el reconocimiento posible.

Así, Lola Marín encaró la misión de dirigir este entrenamiento, pero antes hubo de enfrentarse a una pequeña entrevista realizada por un servidor, donde pudimos conocer más de cerca sus inquietudes y aficiones, además de dejar muy clara su pasión por otros colores, los del Sevilla FC. Tras responder con su indiscutible desparpajo y autenticidad, la sevillana se puso manos a la obra y dio paso al inicio de la sesión, con unos primeros ejercicios de movilidad articular, para enfilar después un trote de algo más de 2 kilómetros. Quedaba, sin duda, lo peor…





Con una amplia “chuleta” en mano, para no dejarse atrás ningún detalle, recetó al grupo una amplia variedad de ejercicios pliométricos, con el fin de trabajar la fuerza y la resistencia, además de abdominales y flexiones, que, junto a la humedad reinante, dejaron al grueso de los asistentes al borde del colapso. Aún había que regresar al punto de partida, donde el pelotón finalizó estirado, marcando diferentes ritmos.



En definitiva, una muestra de que aprender y disfrutar de este deporte es bien sencillo y, todavía más, a las órdenes de una compañera como Lola Marín, grande donde las haya. Gracias por todo y no cambies nunca “mi armaaa”. 







         
        Entrevista a Lola Marín en su kedada.
 



            

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