Almeria, 4 de Junio de 2017
DESPARPAJO
EN EL AZUL
PROMONTORIO DE LAS CORNALINAS
Que bonito es viajar en el umbral del verano camino de uno de los paraísos andaluces. Ir sintiendo ese olor a desierto cubierto de millones de plásticos que se unían con el azul del Mar Mediterraneo es vida. Una vida que nos acerca a una de las joyas naturales mas impresionantes del sur de Europa.
Un desayuno voraz en tranquilidad y pausado en un horario no habitual pero que nos deja hueco para relajar y vivir en toda su extensión unos prolegómenos junto a Triatletas del futuro que nos abre el corazón hacia una juventud inexorable. Pasear por el promontorio de las cornalinas camino del Pabellón donde recogemos el dorsal es vivir eternamente de vacaciones. Un lugar mágico.
Mojo mis zapatillas en la orilla de un Mar Mediterraneo en un ambiente precioso junto a la escuela del Real Club Mediterraneo donde aprendo, que hay que estar junto a quien debe aprender, a quien debe aprender a ser buena persona, a quien debe aprender a respetar al prójimo y a quien debe de aprender a sentir vibraciones de vida. Estar rodeado de ellos me hace sentir excepcionalmente joven. Y además sintiendo la humedad de mis pies en el corazón del promontorio de las cornalinas.
Realmente único.
Minutos tensos, oyendo el discurso del juez de salida y estando atento a sus indicaciones y ver un mar con un oleaje bajo, pero cautivador, ponen el punto de salida a recorrer esos 700 m. de natación donde Manolillo o el Sr. Del Río pone a prueba su mejor estilo dejando claro que lo domina. Cuando empiezan a salir del agua los primeros la atención es plena. Verlo salir como un pez volador por esa arena del Cabo de Gata es ineludiblemente fantástico. ¡¡ Bravo campeón !! Eres un gran triatleta en ciernes.
Trancisión a bicicleta y mas nervios. La espera como siempre es tensa. Ver volar en grupetes a los triatletas es su motivo. Ruben !!! se ha caido se oye entre ellos......mas nervios....ufff......alguien se ha caido y se ha roto la clavícula. A los lejos viene Manolillo acompañado de su compañero Javi. Lo veo fuerte y animado.....vamossssssssssssss
Continua la espera en tres vueltas a un circuito duro en subida y bajada de 20 kms. para volver a la nueva transición para volver a salir disparado para acometer los 5 kms. finales de running.
Nueva experiencia, esta vez en Cabo de Gata, cerca del desierto almeriense y del mar Mediterraneo donde acabamos una jornada mágica dejando nuestro descanso junto a una toalla y recopilando el calor veraniego con unas vistas únicas y que serán recordadas como el tercer triatlón devorado por alguien que poco a poco se va convirtiendo en lo que el desea. Un buen triatleta y sobre todo, y mas importante, disfrutar de un deporte excelente. Estar junto al mar, pienso es, lo clave. Y si es el Mar Mediterraneo, mas no se puede pedir........
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