5 SAN SILVESTRE CÓMPETA

             

 

Cómpeta, 26 de Diciembre de 2021

NO SE TRATA DE VIVIR

SINO DE SENTIRSE

VIVO

Cómpeta es temible y más despues de Nochebuena y Navidad. Con la barriga llena, gracias a Dios, y el trasero cuadrado de estar sentado en las diferentes cenas, acudir a la encerrona competeña es poner mucho empeño. Pero sentirme vivo es acudir a la encrucijada de la Sierra de Almijara.

Se antepone a dos dias de lluvia copiosa, y amanece un día magnifico. Demasiada suerte y la temperatura es increible. Comienzo a surcar esas innumerables curvas camino de una Cómpeta majestuosa. El recorrido te envuelve.

Un pueblo adormecido se vuelve una locura cuando llego a la Plaza Almijara. Es un hervidero de running. La cola para coger mi dorsal me abre las puertas de nuevo al mundo running. Por enesima vez deseaba estos momentos inigualables.

La antesala es visitar lo brillante de una Cómpeta en la cornisa de la Costa del Sol donde la visión es realmente única. Las distintas carreras retrasan la salida. Son las 12.30PM cuando de nuevo estoy en competición. Algo en mi se estremece.

El duro inicio deja presente lo que espera. Los desniveles son brutales y en frio todavia mas. Imposible conseguir ritmo. Las pendientes me ponen a prueba. Con dificultad avanzo. Los 3 primeros kilometros buscando la falda de Almijara son tremendos. Muy duro.

Las vistas de la vega competeña dejan ver al fondo mi Mar Mediterraneo. De película. Precioso. Acabada la dificil ascensión comienzan los carriles en continua subida y bajada por la ladera de una sierra preciosa. Poco a poco voy cogiendo ritmo, y con precaución en la pisada debido al pasado esguince y debo tener cuidado. Mirando paso a paso mi pisada y con confianza aumento ritmo. Todo perfecto. 

Veo Canillas de Albaida a vista de pájaro. Y Cómpeta al fondo. Comienza una bajada en asfalto donde hay que extremar el cuidado. Las rodillas aqui trabajan mas de la cuenta.

Un tobogan increible y accedo a un camino de tierra sendero que bordea el acceso a Cómpeta. Solo cabe una persona. Disfruto de las vistas y rapidamente veo las casas de entrada al pueblo.

La parte final recorriendo esas calles estrechas de otra época a pleno rendimiento y disfrutando a tope me hace llegar a esa plaza donde vuelvo a sellar otra aventura que me hace sentirme muy vivo. He vuelto y por la puerta grande. Cuando paso ese arco de meta, pienso: no se trata realmente de vivir, que se hace, sino de sentirme como realmente quiero estar muy vivo y en perfectas condiciones para disfrutar cada segundo. 

Cómpeta y su temible recorrido siempre quedará en mi recuerdo.

Y para terminar, das las gracias a mi seguidor mas acérrimo, aporte y apoyo, sin su ayuda, ni su compañia, nada seria posible y este post no podría existir. Sin duda es mi motivación tan necesaria y obligada para celebrar la salida de un año 2021 post-Covid y abrir las puertas a otro ilusionante año 2022, que se abre de nuevo en la incertidumbre debido al Covid, ahora llamado Omicron. Hay que esperar al futuro, con ilusión para poder seguir escribiendo entradas para mi historia, y es que quiero seguir sintiendome vivo. Muy vivo.