No soy más que un aprendiz de buena persona y un corredor esforzado. Por cada corredor que recorre el mundo participando en MARATÓN, Media Maraton o Trail, hay miles que corren por el gusto de escuchar las hojas y la lluvia y que esperan que llegue el día en que les resulte todo tan fácil como a un pájaro volar. Para ellos el deporte no es una prueba, sino una terapia; no es un desafio, sino una recompensa; no una pregunta, sino una respuesta.
Despues del frio terrorifico, la lluvia y el vendaval que hemos vivido en Málaga parece que la calma lentamente vuelve. Ha sido un mes realmente horrible, desde el día siguiente que hice los 21k con subida a San Antón el 22 de Enero.
Entrenando a duras penas, con molestias a veces fuertes de frio en la espalda, pude correr Torremolinos y Cullar-Vega. Ha sido una secuencia mensual muy compleja. Pero ha pasado..............
Me encuentro fuerte. Desde Noviembre del año pasado no conseguia estas sensaciones. Molestias del soleo fueron un motivo muy evidente.
Hoy he decidido despues de varios entrenos de calidad hacer frente a uno de mis entrenos favoritos. Recuerdos de antaño.
Hacer Media Maratón con la variante 1 andando+ 1 corriendo y en la parte final 1 andando+2 corriendo.
Hacia tiempo que no habia decidido ir a Sacaba. Pues a por el entreno. Viento frontal no demasiado fuerte y observo como el Paseo Marítimo de Huelin ha sido pasto de un Mar enbravecido.
Voy controlando el kilometro al unísono entre mi reloj y el movil para controlar exactamente el paso de ellos kilometro a kilometro.
Es un entreno magnifico. Andas un kilometro de recuperación y lo activas con el siguiente corriendo. Y los kilometros vuelan sin darte cuenta. No es tan agresivo como cuando se corre habitualmente y con normalidad.
Voy observando como el temporal de Levante todavia está haciendo estragos. En la desembocadura del Guadalhorce el espectaculo es mayúsculo. Precioso. Disfruto del entorno a mitad del entreno. Momentos para el recuerdo.
La vuelta a ritmo cómodo decido hacer la segunda parte del entreno y es forzar algo más haciendo un kilometro andando y dos corriendo mirando mi reloj oscilando los 11 minutos.
Todo perfecto. Sin cansancio. Disfrutando a tope. Un entreno selectivo, que te ofrece fuerza y ritmo y no es agresivo. Por tanto la mejora es evidente. Sin duda un pedazo de entreno.
Son las 7.30AM con todavia una Luna Llena pletórica en todo lo alto del firmamento, cuando me dispongo a viajar a un lugar maravilloso, al sitio donde el verano es "infinito"
Cita con Antonio y Bellido, departimos hacia la salida y veo a muchos compañeros que me llenan de alegría. Ver a Cristobal siempre es sublime. A Antonio "el granaino" un lujazo verlo por estas tierras. A Miguel con cara de batir records.....ufff gente de atletismo. Sin duda me llena el corazón.
Vuelve el recorrido antiguo, sin duda el mejor, con Salida desde El Centro Cultural Pablo Ruiz Picasso. De nuevo estoy en la salida de una nueva Media Maratón. Asi que a por ella.
La salida me une con un numeroso grupo de Cuasicuarentones que van divirtiendose. Esto me entretiene algo y pasado el km 1 observo como Antonio se pega a mi estela. Comienzo a apretar en la zona donde el Dios Eolo apretaba de lo lindo muchos años atrás, lo recuerdo perfectamente. El recorrido es atractivo por el Centro de Torremolinos a una muy buena velocidad. Voy con Antonio. Parece que hacemos tándem.
Voy tirando de él rozando los 5 minutos el kilometro. Voy perfecto, aunque con molestias en la espalda, voy soportando el dolor, pero no me hace mella. Al km. 5 miro mi garmin y 26,10 muy sorprendente para mi. Ufff voy como una moto y Antonio detrás. Esto motiva. Aunque el dolor aqui me aprisiona. Hasta el km. 7 el ritmo es bestial. km. 6 a 4,59 y el km.7 a 4,56 tiempos inmejorables. Ni me lo creo.
A partir de aqui comienzo la gran recta camino de La Carihuela. Comienzo a coger ritmo diesel. Antonio se me marcha. No debo seguirlo. Debo seguir mi ritmo. Ahora sufro un poco y entre el dolor que bajo algo el rendimiento me preocupo.
Voy bien, pero con cautela para llegar al km. 10 con un tiempo asombroso de 54 m. 20 s. Estoy en playa de la Carihuela, lugar de mis míticos entrenos y lugar de los "guiris" mas selectos. El paraiso mas terrenal.
Son 6 kms en recta infinita camino de Playamar. Disfruto al máximo recordando mis grandes vivencias en esta zona entrenando. Mi ritmo es maravilloso, bordeando siempre el 5,30 al kilometro. Veo a Antonio que sufre. Lo cojo a la altura del imperio guiri. Donde sus restaurantes son los de mi corazón. El corazón de una Torremolinos mágica.
Le hablo. Le digo que me siga a ritmo. Y lo consigue. Le apoyo. Le ayudo. Le digo que disfrute. Me sigue. Vamos juntos camino del Rte. El Sardina. Aqui tomo mi segundo gel en el avituallamiento del km. 15 y me dá alas. Voy tirando de Antonio, animandolo.
Me sigue a la perfeccion y avanzamos con buen tiempo intermedio. Llega la hora de la verdad. Bajo algo el ritmo. Le digo que vamos a rozar las 2 horas. Vamos!!!!!!!!
Giramos en el Rte. El Sardina y son kms. mas sufridos pero vamos muy bien. Vamos vamos!!! le grito. Y vamos juntos. Sigo tirando de él. Esto aporta vitaminas.
km. 18 veo que afloja algo y yo voy muy bien. Decido seguir. No aguanta y es el final. Tengo que controlar las embestidas de las subidas camino del terrorifico km final con la subida a Las Mercedes, punto mítico del running malagueño.
Voy solo. Antonio lo pierdo. Llego a Las Mercedes. Subida letal. Muy duro para ser el final. Durísimo. Subo paso a paso, metro a metro. La gente muere en el intento. Con paciencia sigo y sigo hasta llegar al Hotel Cervantes. Lo he conseguido. Me queda el esplendor de Torremolinos.
Voy disfrutando. Vuelvo a sentir la belleza de una Media Maratón mi distancia preferida y mítica. Me siento atleta. Recuerdo mi sacrificio entrenando y mi resultado es llegar a esa recta de meta firmando otra Media Maratón de ensueño. El crono se me vá por un minuto para redondear las 2 horas. Pero es lo de menos.
Bajo el arco de meta comprendo que sigo donde debo estar, porque es parte de mi vida. El mundo "guiri" es mio. Gracias a Torremolinos por haberme dejado sentir tanto.
Volver a Torremolinos es dejar sentencia en el Restaurante Centro Asturiano para comerme una fabada y un cachopo y dejar sellada otra jornada maravillosa para mi curriculum.
Fin a otra Media Maratón en una Torremolinos donde el verano es "infinito" es la ciudad del paraiso 2.