Cártama, 25 de Noviembre de 2018
MEDIA MARATÓN: 70
Bodas de Titanio
AL REVÉS MAS DURA
LARGA VIDA.......
Recuerdo un calor sofocante y como mis zapatillas ardían en el asfalto en el debut de la primera edición cartameña de una media bastante dura. Obligada a ir a Noviembre...¿le damos la vuelta? pues mas dura. Vendida como mas llana en la actualidad se ha transformado en un final de los que me encantan. Larga vida a Cártama.
Un paseo mañañero buscando al famoso puente de hierro cartameño me deja a las puertas de su "rastro" para calentar motores camino de la salida donde saludo y comparto con runners y le doy la bienvenida a un gran equipo humano liderado por José Maria "El Melillero" que está casi al completo con su nuevo equipo Melillero Training Team. Estar con compañeros que viven el running es sentir atletismo. Larga vida al Melillero Training Team que merece la mejor de las suertes.
Vuelvo a estar donde me encanta. En una salida de Media Maratón. Me acompañan Jessica y José Antonio que harán 1o kms. quiero y disfruto estos momentos. Ignacio llega en estos momentos. Son instantes mágicos que solo lo comprende quien siente ese gusanillo que te devora interiormente. Larga vida a esos nervios.
Un pequeño retraso, me santiguo y de nuevo estoy en mi lugar mas deseado. Comienzo con cautela y mis compañeros me anteceden. El circuito es al revés este año. Vamos camino del mítico Puente de Hierro donde se divisa el km.1 5.02 es en bajada y bastante rápido. Larga vida a ese paso por el río Guadalhorce y su historia.
Vamos dirección hacia el Sexmo, barriada cartameña, antaño recorrido final e infernal. Vamos al revés. Mi primo Enry me espera y lo saludo.
El ritmo es alto y decido hacer persecución para cazar a mis compañeros. Aprieto y poco a poco me acerco con tiempos intermedios geniales. Esto me ayuda. En el km 4 lo consigo y me uno a ellos. Gozo estos momentos con el grupo al completo hasta el km 5 donde me despido de ellos en su vuelta. Miro mi garmin y 27 m. 02s. A las mil maravillas.
Comienzo a buscar referencias que me llevan al km 6 y medio donde damos la vuelta y volvemos hacia nuestros pasos. Busco mi ritmo crucero, aunque algo obligado para contactar con algún grupo y no viajar solo. Larga vida a esas liebres que me aportan vitamina.
Me aproximo a la rotonda famosa de la Estación de Cártama y vuelvo a ver a mi primo Enry, en el momento mas crítico de la carrera. He llegado forzado en la gran recta y lo voy notando.
Km. 10 y 53m. 12s. y comienza el enjambre de Estación de Cartama que me ayuda sobremanera. Sus callejuelas dan poder a mis piernas. Larga vida a esas calles. Voy mejorando y en sus continuos cambios de sentido voy adquiriendo fuerza y mejora. Es mi estilo. El paso por todo el corazón cartameño me dirige al km. 15 donde reposa el histórico puente de hierro. Voy fenomenal. Ritmo adecuado y gozando.
Todo esta siendo al revés de aquella primera edición. El duro escenario de inicio camino a Cártama hoy es el final. La acometida es muy dura. Una Cártama en la lejanía es el destino. Sus tres kilómetros en dura subida me pone a prueba. Larga vida a esa genuina subida.
Reductora, paso corto y con paso firme ir metro a metro, sufriendo obvio, pero sintiéndome runner en mi escenario preferido. Es el cóctel explicado en otros post de sufrimiento y gozo que me proporciona y que no tiene parangón. Sin duda el final es bastante duro pero se disfruta.
Con paciencia y buen orden llego a la parte final de la subida y es el km. 18. Es el paso por el corazón de Cártama Pueblo.
Cambio ritmo y enorme. Voy entero y ya solo queda disfrutar del entorno y de la bajada camino del estadio de Atletismo donde me fijo en un antecesor. Larga vida también a esa bajada mítica camino a la meta.
Lo voy cazando y cuando lo tengo a tiro pego el tirón final. Km. 20 veo a Eduardo y accedo al tartán de los dioses, enormemente satisfecho logrando en meta un tiempo de 1h. 56m. 26s. Simplemente fantástico.
Fin de fiesta pleno y tercer tiempo sobresaliente donde destaca el jamón.
Comienzo nuevo dígito que me relanza mentalmente para encarar la decena del 70. El 2019 es el año para intentar completar su corcheta y voy a por ello. Mi reto cada vez mas cerca. Es mi objetivo. En Cártama todo ha sido al revés como antaño pero me ha proporcionado vitalidad porque es mi recorrido preferido. Cambio de situaciones, dureza y recorridos en espacios cortos. Larga vida a Cártama aunque la hayan puesto al revés. Eso si la vuelta que le han dado si cabe mas dura.
El punto final a Cártama y mi septuagesima Media Maratón me permite recopilar algunas de las calorías perdidas y me ponen al derecho, jeje...antes de volver
Ahhhhhhh y el postre que también hay derecho. ¿ o no ?
Solo me queda recordar a ese puente de hierro que tantas aventuras ha dado en su historia, rodeado de inundaciones y debordamientos del río Guadalhorce. Desde aquí quiero darle en mi visita a tierras cartameñas su lugar y sentir junto a el, cuando ha sido noticia porque su río se ha vuelto revoltoso y quiere superarlo. Larga vida a este momento.